La vida siempre da revancha y Hernan Travagliante lo sabe

Comenzó pateando y creciendo como todos los argentinos: en un potrero. Soñaba como todos poder representar a su país aunque sabía que era algo lejano porque había muchos mejores que él. Hoy Hernan Travagliante se denomina ídolo de Javier Mascherano por un motivo, porque al igual que él “va para adelante cuando tiene que poner”.

“Escuchar el himno me emociona mucho”

Cuando solamente tenía doce años le detectaron un tumor maligno en su pierna izquierda y es algo que nunca olvidará: “Tuve varias cirugias y ninguna llegaba a curarme por completo hasta que en el 2001 me enteré que me tenían que amputar”. Lloró como cualquiera, pataleó y hasta miró al cielo preguntandose ¿Por qué? Como todos hicimos alguna vez... pero no se quedó sentado y, al igual que Mascherano, le puso garra a la situación.

Sin nada que perder siguió jugando al fútbol entre sus amigos aún sabiendo que nunca sería lo mismo. A veces los sueños se vuelven reales y un día todo cambió:

“Llegó un amigo con un recorte de una revista donde decían que en Entre Ríos estaba la selección argentina de amputados y no lo dudé... vine para acá a entrenar”. 

Si, ese chico de doce años hoy tiene 30 y cumplió el sueño de pibe... es el seis de la selección argentina de amputados. 

“El equipo se armó en 2001 por Hugo Hereñu, quien hoy es el presidente de la Federación Argentina de Futbolistas Amputados... a él le debo todo por estar aca” dice medio tímido Hernan. Él es un guerrero, no solamente en la vida y en la cancha, sino que también no solo es hincha sino que se denomina “enfermo por Central” 

“Representar al país es la cosa más linda, donde juguemos escuchamos el himno y lo queremos dejar lo más alto posible, emociona” cuenta orgulloso quien ya jugó dos Mundiales (2do en 2010 y 4to en 2012) y dos Copas America (3ro en 2013 y 2do en 2015).

Todos los viajes salen con plata de sus bolsillos ya que no tienen ningún tipo de apoyo a nivel nacional. “Algunos chicos tienen apoyo a nivel municipal o provincial y safan el pasaje, yo siempre me lo pagué menos para venir a las Confederaciones dado que me dio plata para el pasaje la diputada Clara García” cuenta quien una vez al mes tiene que dejar su casa de Rosario para entrenar tres días completos con sus amigos de la selección.

Hace solamente cinco días su selección salió segundo en la Copa Confederaciones detrás de Brasil (que ganó por diferencia de 1 gol). “Llegamos mucho y erramos bastante, creo que faltó un poco de suerte. Quiero destacar el esfuerzo que siempre dimos por el compañero que tenemos al lado y la unión del grupo que hicieron que juguemos el mejor torneo de todos” cuenta sonriente el central.

Además afirma que fueron mucho mejores que Brasil: “Teníamos que hacer cuatro goles en un tiempo (de 25 minutos) porque se había suspendido por falta de luz, parecía imposible pero los pasamos por arriba y ganamos 3-0, estuvimos cerca”. No le gusta nada salir segundo pero sabe que es un logro y no un fracaso y que el fútbol al igual que la vida siempre da revancha

Y sino... pregúntenle a ese chico de doce años que soñaba representar a su país.